Rainer Maria Rilke

" Pero fuera, todo es desmedido. Y cuando el nivel sube fuera se eleva también en ti, no en los vasos que están en parte en tu poder, o en la flema de tus órganos más impasibles: sino que crece en los vasos capilares aspirando hacia arriba hasta en los últimos ramales de tu existencia infinitamente ramificada. Allí es donde asciende, allí es donde desborda de ti, más alto que la respiración, y, último recurso, tú te refugias como sobre el filo de tu alimento. ¡Ah! y dónde después ¿dónde? Tu corazón te expulsa fuera de ti mismo, tu corazón te persigue y ya estás fuera casi fuera de ti y no puedes más. Cómo escarabajo al que le han pisado, te escurres fuera de ti mismo y tu escasa dureza o elasticidad ya no tiene sentido. Oh noche sin objetos. Oh ventana sorda a lo de afuera, oh puertas cerradas con cuidado; costumbres venidas de antiguos tiempos, trasmitidas, comprobadas, jamás enteramente comprendidas, Oh silencio en la jaula de la escalera, silencio en las estancias próximas, silencio allá arriba en el techo. Oh madre, oh tú, única, que te has puesto ante todo este silencio, en los tiempo que yo era niño" Extraído del capítulo" DE LO DE DENTRO Y DE LO DE FUERA" de la POÉTICA DEL ESPACIO de GASTÓN BACHELARD